Familias nahuas del poblado Las Pesadas, Jalisco, acordaron recuperar las 40 hectáreas que les disputan habitantes de Colima y por las cuales el tribunal colegiado en materia administrativa del tercer distrito les concedió el amparo 151/97.

Desde hace años ambas partes se atribuyen la propiedad de esas tierras, pero el conflicto se agudizó recientemente por la colocación de un cerco policiaco por las autoridades de Colima, agregó la Red Jalisciense de Derechos Humanos.

En 1963, las autoridades agrarias asentaron que la superficie en disputa es del ejido Ayotitlán y, por tanto, de Jalisco, pero en 1995, Elidio Monroy Nieves, aliado a la familia Figueroa Soto inició la disputa de las 40 hectáreas y desde entonces –según testimonios de los nahuas– llega a la zona acompañado por elementos de la policía del estado de Colima.

El 11 de julio, siete indígenas del poblado Las Pesadas trataron de colocar las mojoneras y alambre de púas para delimitar los límites del ejido, pero fueron perseguidos y atacados por elementos de seguridad de Colima hasta la delegación de Telcruz. Ante la situación, las familias indígenas acordaron volver a realizar los trabajos de delimitación, con apoyo del comisariado ejidal, los consejos de mayores de Telcruz y Plan de Méndez.

A los indígenas se les tiene aislados y se les presiona con los cortes de los servicios básicos, a pesar de que han solicitado el apoyo del gobierno de Jalisco para recuperar los terrenos.


Fuente: www.jornada.unam.mx